Un aspirante a profesor ha logrado el primer puesto en un concurso para ocupar el cargo de docente sustituto, quedando ahora a la espera de una vacante en su área. Después de superar a varios candidatos en las pruebas establecidas, el participante se encuentra en una lista prioritaria para ser llamado en caso de que surja una oportunidad. Esta situación es común en el ámbito educativo, donde los procesos de selección buscan asegurar que los mejores candidatos estén disponibles para cubrir necesidades surgidas por ausencias temporales de los docentes titulares.
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