La digitalización del tejido empresarial español avanza hacia un nuevo desafío con la inminente implementación obligatoria de la factura electrónica. A partir de 2026, todas las empresas en España deberán adoptar este formato de facturación, utilizando software certificado por la Agencia Tributaria y asegurando remisiones en tiempo real al organismo fiscal. Este cambio normativo promete transformar la gestión contable y fiscal de las organizaciones, adelantándose un año para los trabajadores autónomos, cuya transición podría iniciarse en 2027, pendiente de confirmación mediante desarrollo reglamentario.
Redkom, una empresa de mantenimiento informático, destaca la importancia de anticiparse a esta transición para evitar inconvenientes operativos y sanciones administrativas. Con más de diez años de experiencia en soluciones para pequeñas y medianas empresas, su equipo técnico insiste en que la anticipación es clave para adaptarse al nuevo sistema, que no solo cambia el formato de las facturas, sino que implica una transformación integral de los procesos internos de facturación y control fiscal.
La normativa prohíbe el uso de programas como Word o Excel para la generación de facturas, obligando a las organizaciones a adoptar herramientas digitales avanzadas que cumplan con los estándares técnicos legales. Estas soluciones permitirán una emisión estructurada de facturas electrónicas, asegurando su conservación por al menos cuatro años y garantizando accesibilidad, integridad y seguridad.
Redkom ha desarrollado un servicio integral para facilitar esta transición tecnológica. Este incluye la instalación de software homologado, formación personalizada para equipos de trabajo, soporte técnico continuo, y acompañamiento en el cumplimiento normativo. Más recursos e información están disponibles en su página web oficial, ofreciendo a las empresas el apoyo necesario para adaptarse exitosamente a esta nueva era digital.
