El mundo de la moda lamenta la pérdida de Giorgio Armani, quien falleció este jueves a los 91 años. Renombrado por su sobriedad y elegancia, Armani fundó un imperio valorado en 8.000 millones de euros, manteniéndolo independiente de grandes conglomerados. Su legado continúa a través de su empresa, dejada a familiares cercanos en lugar de hijos. Roberta Armani, sobrina del diseñador, asumirá un rol crucial, mientras que Silvana Armani y Andrea Camerana también desempeñarán roles significativos en el futuro de la marca. Roberta, conocida por su conexión con el mundo del espectáculo, fue clave en la relación entre la firma y las celebridades.
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