El Doha Forum ha sido escenario de intensas discusiones sobre el conflicto sirio, donde Serguéi Lavrov, ministro de Exteriores ruso, ha pedido diálogo entre el Gobierno sirio y la oposición legítima en medio del avance insurgente hacia Damasco. Los rebeldes han capturado Homs, amenazando con dividir el territorio controlado por el régimen de Bashar Asad, y el retroceso de tropas iraníes sugiere un debilitamiento del apoyo a Asad. Pese a las especulaciones sobre la retirada rusa, Lavrov ha reafirmado el respaldo a Siria, sin ofrecer un apoyo explícito a Asad, mientras se intensifican negociaciones entre Rusia, Irán y Turquía, miembros del Proceso de Astaná, para buscar una solución política que respete la integridad de Siria conforme a la resolución 2254 de la ONU.
Leer noticia completa de Internacional en El Independiente.
