El Pleno de la Diputación de Málaga ha dado un paso significativo al aprobar de manera inicial los presupuestos para 2024, los cuales reflejan un aumento del 2,41% en comparación con el año actual, alcanzando un total de 441,3 millones de euros que se distribuirán entre todos los entes y consorcios de la Diputación. Este conjunto de cuentas está formado, entre otros, por el presupuesto de la Diputación, que asciende a 315,51 millones de euros, y otros entes como el Patronato de Recaudación Provincial, Turismo y Planificación Costa del Sol, y los diversos consorcios dedicados a servicios esenciales como el de bomberos y el de residuos sólidos urbanos.
Durante su intervención en el pleno, el presidente de la Diputación, Francisco Salado, enfatizó que estos presupuestos buscan enfrentar los principales desafíos de la provincia, tales como la sequía, la movilidad, la conservación del litoral y la diversificación económica, al tiempo que refuerzan el apoyo a los sectores productivos más destacados de Málaga. Salado describió estas cuentas como las más sociales de la historia de la Diputación, subrayando su papel en la mitigación de problemas derivados de la inflación y la crisis económica que afectan a muchas familias y empresas, especialmente por el aumento de precios en bienes y servicios esenciales.
El presidente también expresó su preocupación por los posibles agravios que las decisiones del Gobierno central, particularmente bajo la dirección de Pedro Sánchez, podrían causar a Málaga y Andalucía. Señaló la inversión desproporcionada en infraestructura ferroviaria en Cataluña en comparación con la falta de inversiones en la red de trenes de la Costa del Sol y otros corredores necesarios en la provincia. Salado mencionó expresamente la ausencia de rebajas en los peajes de las autopistas gallegas en contraste con la situación de la autopista de la Costa del Sol, lo que considera injusto para los malagueños.
En cuanto a las inversiones, los presupuestos de 2024 prevén un incremento del 20% en gastos directos por parte de la Diputación y los consorcios, elevándose a 32,8 millones de euros, además de 41,5 millones en transferencias a ayuntamientos y entidades. Esto eleva el total de inversiones a 118,3 millones de euros, que se destinarán mayormente a proyectos de infraestructura hidráulica y de mejora en el abastecimiento de agua, con una atención particular a la Axarquía y a municipios pequeños.
Las inversiones también abarcan diversas áreas, incluyendo 15,3 millones de euros para proyectos medioambientales, 10,2 millones destinados a mejorar la red de carreteras, y una importante mejora en políticas sociales, que aumentan un 16,8% hasta alcanzar 79,2 millones de euros. Dentro de este rubro, el servicio de ayuda a domicilio para personas dependientes ha visto un incremento significativo.
El Plan para el Fomento del Empleo, por su parte, contará con 10,1 millones de euros, junto con iniciativas orientadas a la oportunidad laboral para jóvenes graduados y emprendedores. En general, el enfoque del presupuesto de la Diputación de Málaga para el próximo año busca consolidar una respuesta integral a las crisis actuales, priorizando el bienestar de los ciudadanos y la mejora de los servicios públicos.
Este avance hacia la aprobación de unos presupuestos que superan los 440 millones de euros es un claro indicativo de la intención de la Diputación de no solo gestionar la crisis, sino de ir más allá, construyendo un camino hacia un futuro más social y resiliente para la provincia de Málaga.
Fuente: Diputación de Málaga.