A partir del próximo curso, se implementarán nuevas directrices destinadas a reevaluar el uso de ordenadores y tabletas en las aulas españolas. Estas medidas buscan optimizar la integración de la tecnología en el entorno educativo, garantizando un equilibrio entre el aprendizaje digital y tradicional. Las autoridades educativas están desarrollando normas, planes y recomendaciones que abordarán desde el acceso a dispositivos hasta pautas para su uso efectivo, respondiendo a la creciente dependencia de la tecnología en el proceso educativo y sus implicaciones para el desarrollo académico de los estudiantes.
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