Un estudio revela que España lidera Europa en el calentamiento de hogares, con un 59,7% de familias que superan los 21°C en invierno. Esto contrasta con países como los Países Bajos, donde solo un 19,3% lo hace. En España, las mujeres controlan el termostato en un 52,5% de los hogares, y los niños ejercen notable influencia. Además, el 33,6% admite ajustar la temperatura sin que otros lo sepan, duplicando el índice de «pícaros térmicos» respecto a otros países europeos. Expertos advierten que esta práctica puede aumentar el consumo energético entre un 6% y 8% por cada grado extra, afectando tanto al medio ambiente como a la economía familiar. Las altas facturas y el bienestar de las mascotas motivan este consumo, y la domótica emerge como solución para optimizar la eficiencia energética. Se recomienda mantener las viviendas entre 19°C y 21°C durante el día, y entre 15°C y 17°C por la noche.
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