La empresa ha llevado a cabo un despido colectivo que impacta significativamente a su plantilla en España, afectando al 21,94% de sus empleados totales en el país. Esta medida forma parte de una estrategia de reestructuración en medio de desafíos económicos y un intento por ajustar las operaciones a las condiciones actuales del mercado. El ajuste de personal se enmarca en una serie de decisiones difíciles tomadas por la compañía para asegurar su sostenibilidad a largo plazo, al tiempo que busca minimizar el impacto en el entorno laboral y en los empleados restantes.
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