Hace un año, España reconoció al Estado de Palestina, marcando un hito en sus relaciones internacionales y generando tensiones con Israel, que retiró a su embajadora de Madrid. Durante este tiempo, España ha intensificado sus esfuerzos para liderar la presión internacional hacia un alto el fuego en Gaza, promoviendo sanciones y un embargo de armas a Israel a través de foros como el Grupo Madrid +. El presidente Pedro Sánchez defiende la solución de dos Estados para alcanzar la paz en Oriente Próximo, mientras aboga por un corredor que conecte Gaza y Cisjordania. La situación actual en Gaza, marcada por miles de muertes civiles y un bloqueo humanitario, ha impulsado a la Unión Europea a reconsiderar su acuerdo de asociación con Israel. Aunque España enfrenta críticas internas por contratos de armamento con empresas israelíes, continúa abogando por sanciones contra crímenes de guerra en foros internacionales.
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