La Diputación de Málaga, junto con el Consorcio Provincial de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), ha iniciado una campaña educativa en centros docentes de la provincia para sensibilizar sobre la correcta disposición de los aparatos eléctricos y electrónicos. Las primeras actividades tuvieron lugar en el Colegio Félix Rodríguez de la Fuente, ubicado en Bobadilla Estación, en Antequera.
Luis Rodríguez, diputado provincial y presidente del Consorcio Provincial de RSU, ha señalado que esta iniciativa forma parte del proyecto europeo de cooperación transnacional eWAsTER, cuyo objetivo es mejorar la gestión de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) en la región del Mediterráneo.
La campaña se llevará a cabo en 28 municipios de la provincia que cuentan con un punto limpio, lo que facilita la concienciación sobre la importancia de no desechar aparatos obsoletos en lugares no habilitados. Rodríguez ha subrayado la gravedad del problema representado por millones de dispositivos electrónicos en desuso, que no solo ocupan espacio, sino que además contienen materiales valiosos y potencialmente contaminantes.
Los talleres educativos en los colegios incluirán experimentos, juegos y acertijos para enseñar a los alumnos sobre los RAEE, su composición y la correcta manera de deshacerse de ellos. Entre las actividades, se realizarán dinámicas como «la pila en el océano» y «el viaje de la tostadora», buscando que los niños aprendan mientras se divierten.
Aunque los residuos eléctricos y electrónicos no son los más numerosos, su impacto ambiental es considerable. A pesar de los avances en la recuperación de electrodomésticos y dispositivos para el reciclaje, la aparición de nuevos productos, como los vápers desechables, plantea un desafío adicional para la gestión de estos residuos.
Luis Rodríguez ha enfatizado el compromiso del Consorcio Provincial de RSU por informar y educar a la población, enfocándose en los más jóvenes para que se conviertan en líderes en prácticas responsables de gestión de residuos en el hogar. La campaña también se complementó con una iniciativa en redes sociales en junio, con el fin de reducir el impacto ambiental de los residuos electrónicos en el Mar Mediterráneo, además de mantener diálogo con productores sobre el tema.
Fuente: Diputación de Málaga.