Inicio Actualidad Título sugerido: «Análisis de la Población de Cernícalos Primilla en Antequera»

Título sugerido: «Análisis de la Población de Cernícalos Primilla en Antequera»

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1 Primilla Primer plano

El cernícalo primilla es uno de los rapaces más estudiados, principalmente debido a su relación cercana con el ser humano. Esta especie, también conocida como halconcillo de los tejados, ha pasado de habitar cantiles rocosos a establecerse en casas de labranza y zonas urbanas. En Antequera, una ciudad rica en historia y arquitectura barroca, se ha consolidado una colonia destacada de cernícalos primilla que ha sabido adaptarse a su entorno, forjando un vínculo singular con los habitantes de la ciudad.

Los primeros censos de esta población se remontan a la década de los 80, bajo la dirección de Manuel Rendón, de la entonces Agencia de Medio Ambiente. A finales de los 90, el autor del presente artículo continuó con esta labor, cuando se contaban alrededor de 10 parejas de cernícalos primilla. En la actualidad, la realización de censos anuales es una responsabilidad compartida por un equipo de personas apasionadas por la conservación, incluyendo a Julio Carralero, Manuel Díaz y Pepo Escobar, formando juntos el grupo Primillas de Antequera.

Sin embargo, esta población no ha estado ajena a los desafíos. A lo largo de las décadas, el cernícalo primilla experimentó un notable declive en sus números, consecuencia de diversos factores como la transformación del uso del suelo, la disminución de barbechos y estepas cerealistas, el uso excesivo de pesticidas y el abandono de viviendas en el campo. Los efectos de sequías recurrentes también contribuyeron a esta situación. Entre los años 90 y 2000, la restauración de edificios históricos, que solían ser sus principales espacios de cría, causó la pérdida de mechinales —los agujeros en las paredes donde los antiguos constructores fijaban el andamiaje— y redujo drásticamente los espacios disponibles para su anidación.

A pesar de estos desafíos, existen motivos para la esperanza. La colocación de cajas-nido en 2012-2013, iniciativa promovida por la Consejería de Medio Ambiente, evidenció un aumento en la ocupación. La exitosa experiencia llevó a realizar más instalaciones de nidales en 2023, con la colaboración del Área de Patrimonio del Ayuntamiento de Antequera y otras instituciones locales. Aunque aún es pronto para evaluar su uso, ya se han observado entradas y salidas de cernícalos en estos nuevos nidales.

Por primera vez en años, la población de cernícalos primilla en Antequera parece estar en recuperación, con censos recientes que indican al menos 14 parejas reproductoras. Sin embargo, el futuro del cernícalo primilla también enfrenta amenazas derivadas de la expansión de huertos solares. Esto plantea la necesidad de implementar medidas que aseguren la conservación de sus hábitats, tales como la creación de zonas reservadas para su alimentación, y el seguimiento de sus movimientos a través de dispositivos GPS.

Además, se sugiere estudiar la viabilidad de declarar la ciudad de Antequera una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Urbana, dada su riqueza en biodiversidad y la necesidad de proteger los espacios vitales para estas colonias de cernícalo primilla frente a la urbanización y la instalación de infraestructuras solares.

El esfuerzo colectivo de conservación está dando sus frutos y muestra que, con la colaboración de distintas entidades y la sensibilización social, es posible crear un futuro esperanzador para esta emblemática especie que, tras saltar de los acantilados a los tejados, sigue buscando su lugar en un mundo en constante cambio.

Fuente: Diputación de Málaga.

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