En un emotivo llamado a la paz, la primera dama de Estados Unidos ha instado al mandatario ruso a considerar el impacto del conflicto en los niños, subrayando la importancia de proteger a los más vulnerables en tiempos de guerra. Durante su intervención, hizo hincapié en el diálogo y la diplomacia como herramientas esenciales para resolver las tensiones internacionales, apelando a la humanidad y responsabilidad de los líderes mundiales para priorizar el bienestar de las generaciones futuras. Su declaración busca sensibilizar sobre las consecuencias devastadoras que la guerra tiene en la infancia.
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