Alexei Navalny, conocido opositor del presidente ruso Vladimir Putin, falleció el 16 de febrero de 2024 mientras cumplía condena en la colonia penal «Lobo Polar» en Rusia. Navalny, cuya vida estuvo marcada por su determinación y resistencia, había anticipado su muerte en unos diarios redactados desde su encierro, que ahora serán publicados como el libro «Patriota». A pesar de haber sido envenenado en 2020 con el agente nervioso Novichok, Navalny regresó a Rusia en 2021, donde fue arrestado y enfrentó múltiples acusaciones, incluidas malversación y extremismo. Su muerte ocurrió semanas antes de las elecciones presidenciales rusas, en las que Putin consolidó su poder con una victoria aplastante. Navalny siempre mantuvo su deseo de no renunciar a sus convicciones ni traicionar a su país, defendiendo así su visión política pese a las adversidades.
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