En un sorprendente giro de su carrera, el renombrado actor Al Pacino apareció en la comedia «Jack y su gemela» junto a Adam Sandler, interpretando un controvertido papel que incluyó un ficticio anuncio de Dunkin’ Donuts. A pesar de las críticas recibidas, Pacino revela en su autobiografía «Sonny Boy» que su motivación fue meramente económica tras ser víctima de una estafa piramidal orquestada por su contable, que lo dejó en bancarrota. El actor, conocido por su papel en «El Padrino», admite que sus elevados ingresos no le permitieron mantener su nivel de vida, y halló en esta película una oportunidad para aliviar su delicada situación financiera. A pesar de todo, Pacino conserva un buen recuerdo de su colaboración con Sandler, a quien considera un gran amigo y profesional.
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