El Consejo de Gobierno de Andalucía ha dado luz verde a los decretos que definen la ordenación y currículo de las diversas etapas educativas en la región, incluyendo Educación Infantil, Primaria, Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y Bachillerato. Este desarrollo se enmarca en la normativa autonómica establecida por la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (Lomloe), diseñada para resaltar la idiosincrasia andaluza, valorar la cultura del esfuerzo y avanzar hacia la excelencia educativa sin dejar a ningún alumno atrás.
El principal objetivo de estos decretos es avanzar en la enseñanza con principios de eficacia y eficiencia, sumados a los de calidad, igualdad, inclusión y excelencia. La meta es fomentar el desarrollo del talento del alumnado andaluz, asegurar el éxito educativo y atender la diversidad. Los nuevos currículos entrarán en vigor en el curso 2023/24, enfocándose en reforzar competencias en materias fundamentales como Matemáticas y Lengua, con un eje transversal en la comprensión lectora.
Para garantizar una participación efectiva en el diseño del nuevo marco normativo, la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional ha establecido una comunicación fluida con los agentes sociales implicados en la educación, incluyendo sindicatos, asociaciones de profesores y representantes de la escuela pública y concertada.
La nueva estructura curricular incrementará las cargas horarias de las asignaturas instrumentales, con un aumento mínimo de 298 horas en el currículo del Bachillerato, distribuidas en 123 horas para Lengua, 105 para Matemáticas y 70 para la primera Lengua Extranjera. En términos de etapas obligatorias, los estudiantes andaluces verán un incremento del 7,2% en el tiempo dedicado a Matemáticas y un 6% en Lengua.
Andalucía se posicionará entre las comunidades autónomas que más horas de Matemáticas y Lengua imparten en sus centros educativos, con incrementos del 28% en Matemáticas y 23% en Lengua. Además, el alumnado de Educación Primaria y ESO contará con 2,5 horas semanales dedicadas a la lectura obligatoria, organizadas por los centros docentes para fomentar la comprensión lectora.
En Educación Infantil, se creará un marco estable que consolidará esta etapa como educativa plena y única. En Primaria, se estipula un mínimo de cinco horas semanales para Matemáticas y Lengua entre 1º y 4º curso, que los centros pueden ampliar hasta seis horas. A lo largo de los seis cursos de Primaria, los alumnos recibirán un mínimo de 105 horas adicionales de Lengua y 157,5 horas adicionales de Matemáticas.
En ESO, los estudiantes tendrán cuatro horas más a la semana de Matemáticas, Lengua y Primera Lengua Extranjera, y se introducen nuevos contenidos como la asignatura de Cultura del Flamenco. En 3º de ESO, se incorporarán las optativas de Filosofía y Argumentación, y en 2º de ESO, el Taller de Educación Plástica.
En Bachillerato, se aumenta una hora semanal de Lengua y primera Lengua Extranjera en 1º, y una hora más de Filosofía y de Historia de España en 2º. Además, se reduce una asignatura optativa para reforzar las materias comunes y enfocar esta etapa en la preparación de la Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EVAU).
En cuanto a la evaluación, promoción y titulación, la nueva normativa mantiene la necesidad de una mayoría de dos tercios en las decisiones del equipo docente para promocionar y titular, y se preservarán las notas numéricas en los boletines informativos de las familias. En caso de tres asignaturas suspensas o más, se tendrán en cuenta la evolución positiva, el esfuerzo y la implicación del alumno en las actividades y medidas de apoyo.
Fuente: Educación. Junta de Andalucía.
