La inteligencia artificial (IA) está reconfigurando el ámbito empresarial a nivel global, y España se encuentra inmersa en esta ola de transformación. Sin embargo, el aprovechamiento pleno de esta tecnología presenta diversos retos para las empresas del país. Un informe reciente de Hitachi Vantara, titulado «The State of Data Infrastructure Sustainability», revela que la ciberseguridad (33%) y la calidad insuficiente de los datos para entrenar modelos de IA (32%) son las principales preocupaciones de las organizaciones al implementar proyectos de inteligencia artificial.
El éxito de la IA depende en gran medida de la calidad de los datos disponibles. No obstante, solamente el 30% de las empresas dispone de los datos necesarios en el momento y lugar requeridos, limitando así el desarrollo y la precisión de los modelos. A pesar de este reconocimiento, solo el 28% de las organizaciones trabaja activamente para mejorar sus bases de datos, y un alarmante 39% no etiqueta sus datos adecuadamente, comprometiendo su organización y accesibilidad.
La ciberseguridad ha adquirido un protagonismo crítico en este contexto. El 75% de las empresas reconoce que una pérdida significativa de datos podría tener consecuencias catastróficas. Además, el 79% teme que la IA pueda ser utilizada como una herramienta avanzada por ciberdelincuentes. Un preocupante 79% de las organizaciones prueba sus soluciones de IA en tiempo real, sin utilizar entornos controlados, lo que incrementa la exposición a fallos y brechas de seguridad. Solo un escaso 7% emplea entornos aislados para experimentar, evidenciando una falta de prácticas seguras.
El informe de Hitachi Vantara también señala que muchas empresas no priorizan indicadores clave como el retorno de la inversión (ROI) o la sostenibilidad en sus proyectos de IA. Un 63% de las organizaciones no enfoca sus esfuerzos en el ROI, y el 65% no considera la sostenibilidad como un elemento clave en sus estrategias. La apuesta por modelos de IA a gran escala, como los modelos lingüísticos amplios (LLMs), que consumen hasta 100 veces más energía que los modelos especializados, representa un desafío significativo en términos de sostenibilidad. España destaca en este aspecto, con un 86% de empresas apostando por estos modelos, superando el promedio europeo del 64%.
El desarrollo de una infraestructura de datos sólida es esencial para respaldar el éxito de los proyectos de IA. Sin embargo, muchas empresas españolas carecen de sistemas avanzados para asegurar la calidad y seguridad de sus datos. Las infraestructuras modernas, además de ser más eficientes energéticamente, pueden mejorar el rendimiento de los modelos y reducir la huella de carbono. Un 29% de los líderes de TI señala la necesidad de ayuda en la gestión de datos redundantes u obsoletos, mientras que el 27% requiere apoyo en el desarrollo de modelos de IA y soluciones de virtualización. La experimentación se ha convertido en la principal vía de aprendizaje para el 60% de los profesionales del sector, quien admite la necesidad de formación especializada.
Ante estos desafíos, las empresas españolas están recurriendo a socios tecnológicos que les proporcionen soluciones integrales en hardware, almacenamiento, procesamiento de datos y software seguro. El informe destaca la importancia de contar con colaboradores confiables para enfrentar retos clave, como la implementación de hardware escalable y seguro, soluciones de datos sostenibles y accesibles, y personal calificado que lidere iniciativas de IA basadas en buenas prácticas.
El potencial de la inteligencia artificial para revolucionar sectores como la atención al cliente y la prevención de riesgos es indiscutible. Sin embargo, para maximizar su impacto, es imprescindible que las empresas aborden temas cruciales como la calidad de los datos, la seguridad y la sostenibilidad. En un mercado cada vez más competitivo, aquellas organizaciones que inviertan en infraestructuras modernas, formación especializada y estrategias sostenibles estarán mejor posicionadas para aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece esta tecnología. La inteligencia artificial no solo es una herramienta para el presente, sino también una clave para el futuro del crecimiento empresarial.