Los enchufes inteligentes se presentan como una solución conveniente y efectiva para reducir el consumo eléctrico en los hogares. Estos dispositivos se conectan a la corriente, se gestionan por WiFi y permiten controlar remotamente los electrodomésticos desde el móvil, integrándose con asistentes como Alexa y Google Home. Además de convertir cualquier vivienda en una «smarthome», permiten ahorrar en la factura de la luz al optimizar el uso de energía y evitar el consumo fantasma. Según la OCU, los hogares pueden reducir hasta 25 euros su gasto mensual ajustando el uso de electrodomésticos a las horas más económicas. Herramientas como el control del consumo en tiempo real, la eliminación de energía innecesaria y la programación adecuada son claves para maximizar los beneficios de estos enchufes, que pueden ser aplicados a dispositivos como calentadores, calefactores y routers para elevar la eficiencia energética y contribuir a un consumo más sostenible.
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