Cuatro congresistas demócratas han viajado a El Salvador para abogar por la liberación de Kilmar Abrego García, un salvadoreño deportado por error a una prisión de máxima seguridad tras ser detenido en Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump. A pesar de la orden del Tribunal Supremo de Estados Unidos para su retorno, Trump ha desafiado esta decisión, y las autoridades salvadoreñas han negado la liberación de Abrego, señalado erróneamente de tener vínculos con pandillas. Los congresistas se han reunido con la embajada estadounidense y grupos de derechos humanos para discutir el caso, mientras que el senador Chris Van Hollen fue el único en reunirse con Abrego, quien denunció las condiciones inhumanas de su detención y mantuvo su inocencia. La situación ha sido descrita como un “secuestro gubernamental” por el congresista Maxwell Alejandro Frost, subrayando la falta de procesos judiciales justos en estas deportaciones.
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