El debate sobre el poder presidencial para ordenar un ataque militar sin la autorización del Congreso estadounidense ha resurgido tras los bombardeos en Irán ordenados por Donald Trump. Mientras demócratas sostienen que se requería permiso legislativo, el gobierno de Trump argumenta que no fue un acto de guerra según la Constitución. Históricamente, las acciones militares sin dicha autorización han carecido de consecuencias legales claras, pero el senador Tim Kaine insiste en su inconstitucionalidad. El secretario de Defensa sostiene que el ataque fue limitado y en defensa de intereses nacionales. La controversia podría llevar a un nuevo impeachment contra Trump, con la congresista Alexandria Ocasio-Cortez ya pidiendo su destitución.
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