La plaza de las Glòries, diseñada por Ildefons Cerdà en el siglo XIX como el centro de Barcelona, ha sido renovada para funcionar como un espacio público con características modernas. Las mejoras incluyen amplios carriles bici siguiendo el trazado de las calles Meridiana y Diagonal, un intercambiador de transporte público, y una nueva zona de juegos infantiles con toboganes y un telescopio. El parque también cuenta con un chiringuito estratégicamente ubicado para padres y un ágora dedicada a la activista Berta Cáceres. Los esfuerzos por fomentar la biodiversidad se ven reflejados en espacios cerrados llenos de vegetación. Además, se incorporaron pipicanes para mascotas y un mirador improvisado. El área está en constante desarrollo, con el superedificio Illa Glòries próximo a recibir nuevos residentes, mientras se define el futuro de varios espacios subterráneos que no abrirán al público debido a su inaccesibilidad y uso actual como salidas de emergencia.
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