Con la llegada del verano y las vacaciones, los precios de vuelos y hoteles suelen aumentar. Sin embargo, un truco puede ayudar a reducir costos hasta en un 30%: usar una VPN. Un estudio de NordVPN reveló que los precios varían según la ubicación del usuario debido a la adaptación de tarifas por parte de las plataformas de reservas. Por ejemplo, vuelos de Ciudad de México a Orlando se redujeron significativamente al conectarse desde Moldavia. En otro caso, la reserva de un hotel en Nueva York mostró un precio menor al hacerlo desde una ubicación virtual en Croacia. Además de la VPN, se recomienda borrar caché y usar el modo incógnito al buscar ofertas.
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