Un deslizamiento de tierra, desencadenado por intensas lluvias, sepultó el domingo la aldea de Tarsin en el oeste de Sudán, resultando en la muerte de aproximadamente 1.000 personas, según informó el Movimiento de Liberación de Sudán. Solo un superviviente fue encontrado entre los habitantes de la aldea, ubicada en Jebel Marra. El grupo liderado por Abdelwahid Mohamed Nour expresó su profunda preocupación por el trágico suceso y solicitó apoyo de las Naciones Unidas para recuperar cuerpos y escombros. Sudán sigue afectado por un conflicto entre el ejército y las Fuerzas de Apoyo Rápido en Darfur del Norte, lo que ha forzado a muchos a buscar refugio en las montañas de Marra.
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