En un esfuerzo por consolidar su posición en la vanguardia de la inteligencia artificial (IA), Estados Unidos ha intensificado sus esfuerzos para establecer una infraestructura robusta necesaria para la economía tecnológica del futuro. La empresa NVIDIA, en colaboración con una serie de laboratorios nacionales, proveedores de servicios en la nube y fabricantes de servidores, ha anunciado un plan ambicioso: la creación de supercomputadoras de IA, fábricas de IA y un marco industrial estandarizado que permitan la construcción y operación de estas instalaciones a escala multi-generacional y gigavatio.
Este impulso ha sido comparado con el momento histórico del programa Apolo, destacando que quien logre dominar la infraestructura y operación de la IA establecerá el compás de la innovación científica y económica en la próxima década. El Departamento de Energía (DOE) instalará siete sistemas impulsados por NVIDIA en los laboratorios de Argonne y Los Álamos, con miras a fortalecer la seguridad, ciencia y energía del país.
En Argonne, destacarán los sistemas Solstice y Equinox. Solstice se convertirá en el superordenador de IA más potente del DOE, utilizando 100.000 GPU NVIDIA Blackwell para avanzar en ciencia abierta. Equinox, por su parte, añadirá 10.000 GPU adicionales y estará operativo para 2026. Ambos sistemas interconectados prometen alcanzar un asombroso rendimiento de 2.200 exaflops de IA.
Los esfuerzos en Los Álamos también son significativos. Allí, se implementará la plataforma NVIDIA Vera Rubin junto a la red Quantum-X800 InfiniBand. Estos sistemas están diseñados para ejecutar simulaciones complejas en materiales, clima y cuántica, con anchos de banda extremos y latencias ultrabajas.
NVIDIA también ha presentado planes para construir el AI Factory Research Center en Virginia, una instalación que servirá como banco de pruebas para tecnologías avanzadas como gemelos digitales. Esta iniciativa se complementa con la introducción de Omniverse DSX, un blueprint para crear fábricas de IA multigeneración a escala gigavatio, optimizando rendimiento, energía y sostenibilidad.
El despliegue coordinado de estas tecnologías abarca ampliamente diversas industrias, incluyendo administraciones públicas y sectores regulados, con gigantes como Cisco, Dell, HPE y Supermicro asumiendo el liderazgo en la integración de GPU NVIDIA y software de IA.
La expansión a servicios de nube y model builders refuerza este esfuerzo, con líderes como Google Cloud y Microsoft trabajando en capacidades avanzadas de computación a través de nuevas instalaciones. Mientras tanto, empresas de sectores farmacéuticos y de salud, como Lilly y Mayo Clinic, también avanzan con la creación de poderosas fábricas de IA para facilitar la investigación biomédica y la medicina personalizada.
Este movimiento estratégico no solo promete transformar la productividad científica e industrial de Estados Unidos, sino que establece un modelo replicable a nivel mundial. La hoja de ruta está claramente marcada, pero el éxito dependerá de factores clave como la cadena de suministro, la gobernanza y seguridad, y la capacitación de talento especializado. Con una ejecución efectiva, el país podría ver una red de fábricas de IA interconectadas que impulsen su economía a nuevas alturas.
