El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, reafirmó la postura de la administración Trump respecto al Sáhara Occidental durante una reunión con Naser Burita, su homólogo marroquí. Rubio subrayó el apoyo a la propuesta de autonomía de Marruecos como la única solución viable para el conflicto, alineándose con el reconocimiento de la soberanía marroquí realizado por Trump en 2020. La posición de Estados Unidos se mantiene mientras el territorio sigue considerado por la ONU como no autónomo, y España es reconocida legalmente como la potencia administradora. La situación se complica por las diferencias entre Marruecos y el Frente Polisario, respaldado por Argelia, que defiende un referéndum de autodeterminación. Tras cinco décadas de conflicto, no se vislumbra una resolución clara, a pesar de los recientes intentos diplomáticos.
Leer noticia completa de Internacional en El Independiente.
