Un proyecto de ciencia ciudadana, liderado por el Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) y la Universidad de Granada (UGR), en colaboración con el profesorado del Real Conservatorio Superior de Música Victoria Eugenia de Granada, ha conseguido transformar el brillo de las estrellas tipo Delta-Scuti en secuencias sonoras que evocan ritmos del flamenco. Mediante una técnica conocida como sonificación, el equipo ha convertido los datos de estas estrellas en composiciones musicales complejas, utilizando timbres y estilos característicos de la música flamenca.
A diferencia de otras iniciativas que traducen el brillo estelar directamente en notas musicales, este proyecto busca crear piezas que reflejen cómo vibran las estrellas en su interior. Según Antonio García, investigador de la UGR y asesor científico del proyecto, estas estrellas experimentan pequeñas «alteraciones» internas que afectan su brillo. La iniciativa, titulada «Escuchando el cante de las estrellas», busca trasladar estos patrones lumínicos a un contexto sonoro, ofreciendo una nueva dimensión en la interpretación del cosmos.
El uso de la sonificación permite a los investigadores no solo transformar datos en patrones sonoros, sino también explorar cómo el sentido del oído puede complementar al análisis visual en la investigación científica. Como señala García, «el audio se convierte en una nueva herramienta para interpretar las señales del cosmos», lo que abre caminos tanto para la investigación astrofísica como para la educación y la divulgación científica.
El proyecto forma parte de la Oficina de Ciencia Ciudadana de Andalucía, que coordina iniciativas para potenciar esta metodología entre diversos actores en la región. Para traducir las frecuencias de oscilación estelar en música, el equipo crea composiciones inspiradas en palos flamencos como la bulería o la soleá. Estas obras son interpretadas por el profesorado del Conservatorio y permiten a la audiencia comprender los procesos físicos que determinan la vida y el destino de las estrellas.
Esta iniciativa también tiene un valor inclusivo, ya que el cambio del soporte visual a uno sonoro abre la astronomía a personas con dificultades visuales. Los investigadores destacan que, aunque el objetivo es demostrar cómo se pueden detectar patrones sonoros en datos estelares, se necesitarán aplicaciones accesibles en futuras fases del proyecto.
Para realizar la «traducción» de los patrones lumínicos a sonidos, el coordinador del proyecto, Sebastiano de Franciscis, explica que el primer paso es conocer la frecuencia del brillo de una estrella y graficarla. Posteriormente, se aplican operaciones matemáticas que permiten identificar las vibraciones de la estrella y su traslado a una partitura musical.
El equipo ha colaborado estrechamente con el Real Conservatorio para convertir el «cante de las estrellas» en música, ofreciendo así una nueva perspectiva para la comprensión del universo. Para divulgar esta innovadora propuesta de ciencia ciudadana, se han desarrollado diversas actividades y talleres, participando en eventos como la Noche Europea de los Investigadores y las XIV Jornadas de Comunicación y Divulgación Científicas.
Este proyecto es un ejemplo de cómo la ciencia ciudadana puede involucrar a la sociedad en el proceso de generación de conocimiento, trabajando de manera coordinada con la comunidad científica y agentes sociales. Co-financiado por diversas instituciones andaluzas, este esfuerzo conjunto busca abrir nuevas puertas en el ámbito de la astrofísica y la divulgación en general.
Fuente: Instituto de Astrofísica de Andalucía