La Oficina Federal Alemana para la Protección de la Constitución ha clasificado al partido Alternativa para Alemania (AfD) como extremista de ultraderecha, provocando críticas por parte de figuras estadounidenses como Marco Rubio. Este hecho evidencia una creciente tensión entre Estados Unidos y Europa, exacerbada por la administración de Donald Trump, quien promueve políticas que desafían el orden liberal y democrático europeo. Trump busca establecer un orden mundial autoritario, mientras Europa enfrenta el reto de responder a su agresión, recalibrar alianzas y disminuir su dependencia tecnológica de Estados Unidos. Además, se promueve la cooperación con naciones afines y la búsqueda de una soberanía estratégica en defensa y tecnología. Sin embargo, la independencia europea de EE.UU. presenta desafíos, especialmente en el contexto de una Comisión Europea tradicionalmente alineada con Washington.
Leer noticia completa en El Pais.