En una cumbre celebrada en Kiev, Estados Unidos, Reino Unido, Francia y otros aliados europeos advirtieron a Vladímir Putin sobre la imposición de sanciones adicionales a los sectores energético y bancario rusos si no acepta un alto el fuego en Ucrania a partir del lunes. Tras una reunión telefónica con Donald Trump, Volodímir Zelenski y los líderes europeos hicieron llegar el ultimátum a Moscú, mientras que Putin indicó que «estudiará» la propuesta. El Kremlin, sin embargo, calificó las presiones como inútiles. La reunión coincidió con el alto el fuego unilateral de Rusia por el 80º aniversario de la victoria sobre la Alemania nazi. En paralelo, Putin resaltó su relación con China y Corea del Norte durante las celebraciones del Día de la Victoria, utilizado como demostración de fuerza ante Estados Unidos. El Kremlin ha criticado las declaraciones europeas, considerándolas contradictorias y confrontacionales.
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