Hamás ha liberado a cuatro mujeres militares israelíes, retenidas desde octubre de 2023, en un acto transmitido globalmente que subraya su aparente control sobre Gaza, complicando el objetivo de Israel de eliminar su influencia. Este intercambio se enmarca dentro de un acuerdo frágil para un alto el fuego, con fuertes tensiones debido a acusaciones mutuas de incumplimiento entre ambas partes. Por cada militar liberada, 50 prisioneros palestinos han sido liberados, incluidos condenados a cadena perpetua, algunos deportados. La liberación, celebrada en Tel Aviv, refleja el delicado equilibrio entre esperanza y incertidumbre en la región. Mientras el proceso sigue adelante, las escenas de celebración palestinas, prohibidas en lugares como Jerusalén, destacan la dimensión propagandística de la disputa. En medio de las tensiones, persisten tensos enfrentamientos entre el simbolismo de las liberaciones y el doloroso telón de fondo dejado por años de conflicto.
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