Brad Pitt, estrella indiscutible de Hollywood, encontró un punto de inflexión en su carrera con el thriller «Seven» de David Fincher. Tras una serie de fracasos y un declive personal, el guion de Andrew Kevin Walker revitalizó su pasión por la actuación, alejándolo de su imagen de «chico guapo» y mostrando su capacidad dramática. En el filme, Pitt interpreta al inspector David Mills, quien junto a Somerset, encarnado por Morgan Freeman, persigue a un asesino que utiliza los siete pecados capitales para elegir a sus víctimas. A pesar de que su estreno no fue ampliamente reconocido en premios, «Seven» se ha consolidado como una película de culto, destacada por su atmósfera opresiva y su final impactante, el cual Pitt defendió fervientemente. Actualmente, el actor sigue siendo un referente del cine, estrenando recientemente «F1: La película» con un presupuesto de 300 millones de dólares.
Leer noticia completa en OK Diario.
