Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, se declaró culpable de dos delitos: mentir en un formulario oficial para la compra de un arma de fuego y evadir impuestos por un total de 1,4 millones de dólares. Este acuerdo de culpabilidad marca un significativo momento en las continuas investigaciones sobre su vida personal y financiera. A pesar de los cargos, se especula sobre las posibles repercusiones legales adicionales y cómo estas podrían influir en el ámbito político, especialmente considerando su vínculo cercano con el presidente. La decisión de Hunter Biden podría tener implicaciones tanto en su vida personal como en la percepción pública de su familia.
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