Un documento de consenso analiza los ataques a Irán, mencionando repetidamente a Israel o «los israelíes» en siete ocasiones, mientras omite cualquier alusión a Estados Unidos. Esto resalta una particular focalización en la implicación israelí en las tensiones regionales, sin hacer mención de posibles involucros por parte de actores estadounidenses. El contenido del documento sugiere un enfoque delimitado hacia la participación directa de Israel en los recientes eventos, lo que podría tener repercusiones en la percepción internacional sobre el conflicto entre las naciones involucradas.
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