La selección española de baloncesto enfrenta un desafío significativo al jugar contra Chipre en el Eurobasket 2025, apenas 24 horas después de medirse con Bosnia y Herzegovina. Este exigente calendario ha sido duramente criticado por el seleccionador Sergio Scariolo, quien calificó la planificación de partidos y controles antidopaje por parte de la FIBA como una «falta de respeto». En su última aparición con el equipo antes de centrarse en su carrera en el Real Madrid, Scariolo aconsejó a la FIBA evitar controles antidopaje tan tarde en la noche tras jornadas consecutivas, sugiriendo que se podrían haber programado en momentos menos exigentes.
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