El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha condicionado el fin de la guerra en Gaza a la implementación del plan de Donald Trump, que propone trasladar a dos millones de residentes de la Franja a otros países árabes. Netanyahu insiste en el retorno de todos los rehenes israelíes y el desarme de Hamás. En una rueda de prensa, confirmó que 20 de los rehenes están vivos y anunció un alto el fuego temporal. Israel está dispuesto a permitir la entrada de ayuda humanitaria en Gaza para evitar una catástrofe, aunque acusa a Hamás de saquear los suministros. Netanyahu afirma que el Ejército israelí ha ganado terreno y posiblemente ha eliminado a líderes clave de Hamás, mientras rechaza la presión internacional y las críticas europeas.
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