La actividad en las megaciudades de Guangdong, una de las regiones más densamente habitadas del mundo con cerca de 130 millones de habitantes, ha cesado ante las alertas de inminentes desastres naturales. Se esperan inundaciones significativas, marejadas ciclónicas que podrían alcanzar hasta cinco metros y riesgos de deslizamientos de tierra, llevando a las autoridades a tomar medidas preventivas extremas para proteger a la población.
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