Tadej Pogacar, considerado el mejor ciclista del mundo, logró una victoria destacada en el Giro dell’Emilia, en el que lució por primera vez el icónico maillot arcoíris tras conquistar el Mundial en Zúrich. En una carrera de 215 kilómetros en Bolonia, Pogacar evidenció su dominio atacando desde lejos y alcanzando una ventaja considerable sobre sus rivales. Su actuación ha sido descrita como un despliegue de técnica y resistencia excepcionales, continuando con su objetivo de ganar cada carrera en la que compite, sin obsesionarse por igualar el récord de Eddy Merckx. A sus 26 años, esta victoria representa su 87ª en el WorldTour, y asegura que su éxito se debe a una combinación de entrenamiento de fuerza, una nutrición cuidadosa, y su capacidad para mantener una energía constante durante las competiciones. Tras el triunfo, Pogacar se prepara para nuevos retos en el calendario ciclista, con el Lombardía como uno de sus próximos objetivos.
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