El poder local en Portugal ha experimentado un cambio significativo con las recientes elecciones municipales, en las que el Partido Social Demócrata (PSD) ha consolidado su influencia al dominar 132 de los 309 ayuntamientos, reflejando un giro continuo hacia la derecha. El Partido Socialista (PS), aunque sigue siendo influyente, perdió algunas posiciones importantes al pasar de 149 a 126 cámaras municipales. A pesar de ello, el bipartidismo predomina en el 89% de los ayuntamientos. En contraste, Chega, el partido ultraderechista, experimentó una decepción al lograr solo tres alcaldías, lejos de sus expectativas. Las mayores ciudades, incluidas Lisboa y Oporto, estarán bajo el control de coaliciones de derecha. La resiliencia del PS y el estancamiento de la ultraderecha se interpretan como una vuelta a la política tradicional a nivel local.
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