Una investigación de la ONU acusa a Israel de llevar a cabo una política de guerra que implica la destrucción deliberada del sistema de salud en Gaza, actos que podrían considerarse crímenes de guerra y contra la humanidad. Navi Pillay, excomisionada de Derechos Humanos de la ONU, ha señalado que Israel realiza ataques constantes contra personal e instalaciones médicas. El informe, que se presentará ante la Asamblea General de la ONU, también denuncia torturas y asesinatos de personal médico, así como ataques a vehículos médicos y restricciones para pacientes que necesitan salir del enclave palestino. Israel ha rechazado estas acusaciones, calificándolas de un intento de deslegitimar su existencia. Además, el director de la OMS, Tedros Adhanom, ha denunciado que el ejército israelí ha impedido operaciones médicas críticas en Gaza, incluidas evacuaciones y entrega de insumos.
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