En la actualidad, con el objetivo de mejorar las experiencias de los usuarios, se recurren a diversas tecnologías como las cookies, las cuales permiten almacenar y/o acceder a la información de los dispositivos. Mediante el consentimiento de los usuarios, estas tecnologías facilitan el procesamiento de datos como el comportamiento de navegación o las identificaciones únicas en ciertos sitios web. Sin embargo, es importante tener en cuenta que no otorgar o retirar dicho consentimiento podría perjudicar negativamente el funcionamiento de ciertas características y funcionalidades.
Estas tecnologías se categorizan en diferentes tipos según el propósito que cumplen:
Funcionales: Son estrictamente necesarias para permitir el uso de un servicio específico solicitado explícitamente por el usuario o para la transmisión de comunicaciones a través de redes electrónicas. Este almacenamiento o acceso técnico es fundamental para garantizar el correcto funcionamiento de los servicios solicitados.
Preferencias: Se utilizan para almacenar preferencias no solicitadas por el usuario. Este tipo de almacenamiento favorece la personalización de los servicios, ajustándose a los gustos o necesidades del usuario sin que él lo haya especificado previamente.
Estadísticas: Estas cookies se dedican exclusivamente a fines estadísticos, especialmente las de carácter anónimo. Al carecer de requisitos específicos, su uso se centra en obtener datos que, sin el cumplimiento voluntario del proveedor de servicios de Internet o registros adicionales de terceros, no pueden emplearse para identificar al usuario.
- Marketing: Su función principal es facilitar la creación de perfiles de usuario con el fin de enviar publicidad personalizada o seguir al usuario a través de distintas plataformas web con fines de marketing similares. Este tipo de almacenamiento o acceso técnico es vital para las estrategias de marketing digital actuales, permitiendo a las empresas llegar de manera más efectiva a su público objetivo.
En resumen, el uso y gestión de estas tecnologías requieren del consentimiento de los usuarios, quienes deben estar informados sobre el impacto que su aceptación o rechazo puede tener en su experiencia en línea.
Fuente: CEA.