En un contexto crucial de conflicto, surge un llamado urgente a la comunidad internacional para sostener los esfuerzos bélicos. Las palabras claras y contundentes de la advertencia revelan una dependencia crítica: «Sin la ayuda americana, perderemos la guerra». Este reconocimiento expone la intensa necesidad de apoyo externo para evitar un desenlace adverso, poniendo de manifiesto la fragilidad de la situación actual y la urgencia de salvar lo que aún es posible en una batalla que se cierne sobre un precipicio determinante.
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