El proceso para elegir al nuevo Papa ha iniciado en el Vaticano, 16 días después del fallecimiento de Francisco. El maestro de ceremonias, Diego Ravelli, pronunció el «Extra omnes», indicando el inicio del cónclave con los cardenales aislados. En la Capilla Sixtina, tras el juramento, las comunicaciones fueron bloqueadas para mantener la privacidad. El cierre de puertas estuvo a cargo del cardenal George Jacob Koovakad y la señal televisiva se cortó. La ceremonia comenzó con una meditación del fray Raniero Cantalamessa. Los 133 cardenales se encuentran bajo la dirección de Pietro Parolin, posible candidato al papado, quien dirigirá las votaciones. Los cardenales asiáticos y africanos apoyan a sus propios candidatos, mientras el proceso avanza para decidir el futuro de la Iglesia.
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