En un clima de crecientes tensiones en Venezuela, el presidente Nicolás Maduro ha intensificado la movilización militar y policial en Caracas, entregando fusiles de asalto rusos a civiles frente al Palacio de Miraflores. Maduro, ataviado en uniforme camuflado, decretó la activación del Órgano de Defensa Integral de la Nación, una estructura que centra al Estado en situación de conflicto. Durante un acto oficial, anunció la captura de siete nuevos supuestos mercenarios de Estados Unidos, Colombia y Ucrania, acusados de conspiración, en total armonía con denuncias previas del ministro de Interior, Diosdado Cabello, sobre detenciones de extranjeros vinculados a planes subversivos. La oposición, que anuncia una manifestación para el 9 de enero, pretende que Edmundo González Urrutia regrese a Venezuela para asumir la presidencia, estimulando el incremento de las tensiones políticas en el país.
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