Nvidia ha concluido 2024 destacándose como un referente imperdible en Wall Street y entre los inversores minoristas, consolidándose firmemente como la favorita del sector tecnológico. El análisis de Vanda Research, informado por CNBC, revela que el fabricante de chips ha atraído cerca de 30.000 millones de dólares provenientes de pequeños inversores durante el año, un monto que prácticamente triplica los 11.400 millones obtenidos en 2023 y supera significativamente las entradas experimentadas por otros gigantes tecnológicos como Tesla.
El vertiginoso crecimiento de Nvidia en 2024 no solo se refleja en los mercados, con una revalorización de más del 180%, sino también en su creciente preferencia entre inversores minoristas. Este desempeño la sitúa como una de las grandes protagonistas del panorama bursátil, superando incluso a Tesla, que tradicionalmente ha liderado entre los pequeños inversores, acumulando 14.700 millones de dólares este año. El avance de Nvidia ha sido impulsado por su liderazgo en tecnologías de inteligencia artificial y semiconductores.
La cantidad de ingresos de Nvidia de pequeños inversores casi duplica las cifras alcanzadas por el SPDR S&P 500 ETF Trust (SPY), uno de los indicadores más emblemáticos del mercado estadounidense. Este dato subraya la magnitud del cambio de preferencia hacia Nvidia entre los inversores minoristas.
No obstante, el ascenso meteórico de Nvidia en el mercado no ha estado libre de desafíos. En un sector de alta competencia, rivales como AMD, Intel, y las arquitecturas ARM se esfuerzan por cerrar la brecha. AMD ha avanzado con su mercado de GPUs y procesadores de alto rendimiento, mientras que Intel ha reforzado su foco en inteligencia artificial y computación avanzada a través de su línea Xeon y GPUs Arc. ARM, por su parte, con un ecosistema de licencias amplio y su adopción en dispositivos móviles y servidores, se posiciona como un jugador crítico en el futuro del hardware para inteligencia artificial, especialmente ante la creciente demanda de soluciones energéticamente eficientes.
Pese a estos retos, Nvidia ha mantenido su liderazgo, especialmente en sectores clave como el entrenamiento de modelos de inteligencia artificial, donde sus GPUs son fundamentales. Esto no solo le ha permitido dominar el ámbito de los semiconductores, sino también marcar la pauta en la transformación digital global.
El éxito de Nvidia se vincula directamente con su papel central en la revolución de la inteligencia artificial. Sus GPUs, incluyendo las H100 y A100, han sido esenciales para el entrenamiento de modelos avanzados de aprendizaje profundo, aplicaciones que abarcan desde la generación de texto e imágenes hasta la conducción autónoma y la investigación científica. Esta posición estratégica ha disparado la demanda de sus productos, atrayendo a un espectro diverso de inversores.
Asimismo, Nvidia ha liderado desarrollos clave en centros de datos y computación en la nube, donde la inteligencia artificial se ha convertido en un recurso indispensable para empresas tecnológicas y startups. Sin embargo, Nvidia no puede permitirse bajar la guardia. Con AMD y otros jugadores intensificando sus esfuerzos, y con innovaciones como los chips RISC-V emergiendo como alternativas, el panorama competitivo para 2025 se anticipa aún más dinámico. No obstante, con una base firme y un año récord en rendimiento bursátil, Nvidia se perfila como el líder indiscutible en la carrera hacia el futuro tecnológico. La clave de su éxito no radica únicamente en sus innovaciones, sino también en su habilidad para atraer a inversores minoristas, consolidándose como una de las empresas más influyentes del sector.